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“LA VIDA ES UN MOMENTO”
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Todos los días te escribo,
porque no quiero que olvides,
que la vida es un momento,
un momento irrepetible,
que aproveches cada instante,
cada día que recibes,
cada palabra sincera,
palabras que te bendicen.
Las que por ti nunca duermen,
las que de rojo se tiñen,
de rojo como las rosas,
que aquí quiero describirte.
Te las presta este romance,
de bellos versos que insisten,
diciéndote que la vida,
en su brevedad restringe,
la belleza de las flores
que yo planté en tus jardines,
dejándote mis amores,
pues quiero que se aproximen,
al despertar la mañana,
a tu ventana y te silben,
esperando que esté abierta
y a tu poeta no olvides,
porque muere al ofrecerte,
momentos irrepetibles.
Yo quiero ser esa trova,
pero tú eres quien decides,
y al aceptarla saber,
que en tus labios sobrevive
y convertida en canciones,
noche tras noche vigile,
tus sueños que al fin y al cabo,
son los sueños que me afligen,
los que cogiendo mi pluma
al detalle hacen que cuide
cada rima y cada verso,
día a día han de lucirse,
como ilusión de poeta,
a la espera de cubrirte,
de abrazos interminables,
de petalada increíble,
de susurros y caricias,
de besos que te aproximen,
momentos tiernos que sean,
momentos los más felices.
En tu pecho este romance,
lo dejo pues que termine
y me conformo pensando,
que conseguí que te mimen,
estas letras lisonjeras
y aunque parezca increíble,
que sepas que volverán,
si es que dios no me lo impide
a traerte nuevos versos,
los versos que te bendicen,
regalándote las rosas,
que yo planté en tus jardines,
te dejarán nuevos sueños
y espero que me confirmen,
que mañana al despertarte,
me recuerdes y no olvides,
que la vida es un momento,
un momento irrepetible.
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Carles C. 14/VIII/2013
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